La cadena de tiendas bricolaje Brico Depôt ha anunciado que abandonará la península ibérica. Actualmente la compañía cuenta con 31 tiendas (27 en España y el resto en Portugal) y emplea a 1.700 trabajadores. Según el grupo británico Kingfisher, propietaria de esta marca de distribución de artículos de bricolaje, con esta decisión quieren reforzar su presencia en países donde tienen más cuota de mercado. Además de España y Portugal, la firma también dejará de trabajar en Rusia. «Esto nos permitirá aplicar nuestra estrategia con mayor enfoque y eficacia en nuestros mercados principales, donde contamos o podemos alcanzar una posición de liderazgo», explica la consejera delegada del grupo británico, Véronique Laury.
Brico Depôt está presente en el mercado español desde 2003, desde que abriera su primera tienda en Viana (Logroño). Según datos de la compañía, en su último ejercicio fiscal BricoDepôt España logró un beneficio operativo de 2,2 millones de euros. El negocio de Kingfisheren la península ibérica mejoró un 0,9 por ciento entre agosto y octubre hasta alcanzar los 98 millones de euros. En todo el mundo el grupo británico acumuló unas ventas de 3.426 millones de euros, un 0,2 por ciento más que en el año anterior.
Vaya, con beneficios y aun así deja el mercado. ¿Pero, que paso?